Victoria Falls

Tomé un vuelo domestico desde Ciudad del Cabo hasta Johanesburgo y de ahí hasta la ciudad de Victoria Falls en Zimbabwe. Al llegar al aeropuerto, unos bailadores folclóricos reciben a los turistas con bailes muy tradicionales y unas vestimentas tribales.

Luego llegué al hermoso Kingdom Hotel, que es el mejor hotel de todo el país y muy bien catalogado por el turismo internacional. Las comodidades son de altura, las comidas muy condimentadas y exquisitas, las atenciones te hacen sentir como todo un rey. Eso no lo cambio por nada en el mundo.

Pero lo mejor de esta ciudad fueron dos cosas: el recorrido por las impresionantes Cataratas Victoria y el safari por la selva montado en un elefante. Ambas experiencias me ayudaron a aprender más del planeta, de la naturaleza humana y animal y sin dudas me ayudo a crecer como ser humano, a tener más autocontrol, pero sobre todo a ser más agradecido de las oportunidades que me regala la vida para disfrutarme estas experiencias.

Pasé por el famoso Puente de las Cataratas Victoria y estaban haciendo bungee jumping, actividad que quería hacer pero en el momento que llegué y miré todo, pues no me atreví. Soy honesto, sentí miedo de hacerlo.